30/3/15

Que tic tac, que toc toc..

Tengo un toc, un qué? Un trasToc toc, quién es? Soy yo. Tu trastorno en torno al modo de tu ansía del control. Ábreme las puertas o entro sin licencias a tu mundo de obsesión. On, enciendo el botón. Listos para un viaje sin escalas alrededor de mi salón. Vacío y lleno una y otra vez el mismo cajón, ordeno las ordenes que brotan en mi cabeza antes de llegar a la explosión. TOC como conclusión. Nado en espirales de manías que cantan agonías siempre en do mayor. Mi Solución es mejor ahora que hace diez minutos olvidados en el reloj, que tic tac, que pasa, que toc toc que pesa, que aquí y ahora las cartas sobre la mesa, mi sangre se espesa, me cuesta verlo bien y si es correcto no me renta. Manos a la obra, vuelta al principio esta cabeza que se estresa, no estaba ahí antes ese libro con esa filosofía tan concreta, entre todo este caos sus letras no pegan y se pegan por llevar la razón en cada página que yo no lea, guardo misterios para que no me vean mientras un martillo enorme el pensamiento me golpea. Está mal! Reacciona! Venga. 

Y..

Y si una hoja en blanco es solo un salto desde la mente a mi mano y si a través de mis dedos hablo camuflando silencios en versos largos. Y si la tinta no es más que las frases que sangro, distinto espesor según el dolor y el rango, bolígrafos con vida propia que se van gastando. Y si los latidos que retumban en mi pecho, a gritos, me están llamando, si la piel responde, sin querer, lo que estoy negando.. Y si atravieso con una mirada millones de estados, si corro, si canto, si dejo que el reloj no cuente tanto y entre tanto tonto ser la única que está soñando. Y si mis pies quieren ir más rápido, mi cabeza sin rumbo y mi boca más despacio. Salgo con la luna y con el sol me tapo. 

27/3/15

Cobarde, de nada..

Cobarde el que no hable, el que se calle, aquel que vea que de mi boca salen frases desechables. Cobarde el que de un paso atrás y tres hacia adelante, el que se plante y aquel que venda aire. Cobarde cada mente pensante, cada instante imborrable, todos los momentos que están por llegar y los que fueron de alguien. Cobarde cada risa que se escapa, cada palabra que se estanca, cada mirada que mata el alma, cada deseo por cumplir y que nunca pasa. Cobardes también mis ganas, mis extremidades que se hacen largas por tocar tu cara, mis frases despistadas que se pierden para ser buscadas, cobardes mis besos que se amontonan en mis entrañas. 
Cobardía tardía que llora asustada, cobardía con escudo, capa y espada. 
Cobarde en mi cama. 
Gacela contra animal de granja..
Muro gris que tapa el ansia, sombra que proyecta calma. Cobarde yo y cobarde todo lo que callas.

 Cobarde la batalla..

26/3/15

Ahora escribo mierdas varias por que desvarío con ellas por que antes era polvo y ahora son sus piernas. Cohíbese mi estado embriagado de tus palabras a medias. A solas a oscuras que jueguen las lenguas. Salto primero y para que lo entiendas soy yo la que queriendo a querido a tientas.

16/3/15

Enciende y apaga..

Anda anda que no andas nada, palabras gafadas, mejor bocas cerradas. Enciende y apaga. 

Niña de grandes ojos pequeños..

Bajó la niña del cielo, salía de su pecho humo negro y sangre de sus dedos. Estuvo en una nube durante mucho tiempo. Inventó, allí arriba, un cuento, donde tocar su pelo no era raro y cada beso era un momento perfecto. Las palabras que aquí solo escribe allí se cumplían en cada encuentro. Bocas que encajaban entre ceniceros llenos. Era fácil volar superando miedos, viviendo sueños, apartando el tiempo que abajo es eterno. Pero sabía, que todo eso, no era cierto. Que algún día la realidad le abofetearía lento. Dolor como consecuencia de un sentir incorrecto. Y descendió de golpe por prevenir sentimientos nuevos. No es más ni es  menos. Aquí abajo van teniendo peligro los sueños por eso no duerme la niña de grandes ojos pequeños. Explotó por dentro en el descenso, la piel quería desprenderse de su cuerpo, volver a dejarse llevar antes que seguir en silencio. Pensaba mucho, reía muriendo, aún notaba el tacto en armonía de aquellos dedos. Hizo fotografías al viento por recordar su aliento, en cada encuadre siempre su alo de fuego..

Si he de caer.. Caeré primero..

Que poco importan aquí los miedos, si he de caer, caeré primero, entre un quiero y no puedo en tierra de nadie se ahogan sueños. Eterno momento enganchado a tu cuerpo, no quiere soltarse si con ello muero. Pienso, luego no duermo, duermo y eres tu, siempre, el final del cuento, el principio del misterioso reloj que no marca el tiempo. Roza con ganas mis ganas o vete lejos. Ojos perdidos en el cielo apuntan siempre al mismo dedo, no es la voz que te viste de negro la misma que quiere ganar el juego. Y escribo lo que callo por no deshacerme a fuego lento, en un momento en el que siento que si dejo de sentir estaré matando besos. El frío es hielo, el hielo es fuego, el fuego deja marcas de odio a modo de recuerdo. La vida es esto, lo que detesto,  mi yo más cobarde atado con gestos, mi boca, que por si se equivoca, prefiere callar a que la tachen de loca. Y como consecuencia remota, mi piel no es más que el reflejo de aquella persona que toca. Entre nubes no cambia la cosa, podría mirarte y deshacerme de la gente que estorba, en una impecable maniobra hacer que mi mente le contará a la tuya mi historia, sin letras directas que se conserven en ambas memorias, un aquí y ahora que no importa, que transporta, que te hace volar y sin manos, toca. Suavidad en cada gota que recorre un cuerpo, noto como cae de las estrellas para rozarte lento, para mostrarme el camino que recorreré luego. Sin saber como hacerlo, me muevo, encajan las manos como piezas de lego, aquí no hay gravedad que mueva el miedo, me buscas despacio, para unirte al juego. Que si he de caer, caeré primero pero antes quiero oírtelo decir tan cerca como espero que quieras hacerlo. Tengo las llaves del cielo, ceniceros a medias y cigarros enteros. Si vienes, te espero. No es más que un lienzo en blanco, ante nuestros ojos, el universo. Puedo pintar cada verso, enmarcar cada beso, y si he de caer, caeré primero.. Que más da, morir matando que matar muriendo, en mi cuello tu aliento, lenguas que gritan encuentros, mundos paralelos confusos perdidos en agujeros negros. Soy menos yo en directo. Si lo intento no acierto, pero más "ahoras" y menos "luegos", más "posibles" y menos "sueños", más "mordiscos" y menos "besos", más "acciones" y menos "intentos".. Batallan mis sentidos entre un quiero y no puedo. He disfrazado tantas veces la cordura de secretos que sin querer quererlo miento a voz en grito, me arrepiento, en un bucle infinito de remordimientos internos. Que locura tan sana el verlo sin que esté sucediendo, y otro gesto modesto que detecto al vuelo! Quiero! Quiero! Perderme en tu pelo, saber a que saben todos los actos que niego, quiero probarte para repetir en silencio sin nadie que juzgue estos malditos deseos. Se agota el espacio que nos envuelve en su lecho, sabes que si he de caer, caeré primero, en tus días consentidos caeré acolchada en tu pecho, caricias que suman lo bueno y restan desquiciados entuertos. Será hoy que caerá agotado mi cuerpo, en movimiento no pesa mi peso para acto seguido destrozar el alma que creo que tengo.   Si vas a destruirme hazlo ya aunque sigamos subiendo. Si cortas de raíz no habrá sufrimiento. Valiente deseo ardiente que se quedará con las ganas de verlo. Pero si he de caer, caeré primero.

Parto de la base..

Parto de la base del desfase, donde todo es posible y nada tan grave. Parto y reparto para partir el tiempo en fases, para que un momento se haga eterno con solo mirarte. Parto besos en el aire, ando más deprisa si vas delante, escondo mis manos para tocarte, el ritmo lo marca un corazón que late y no quiero llevarle la contraria por ser mi aliento la clave.  Parto momentos que no son de alguien, que vuelan en noches recorriendo calles, que incitan y citan frases que en bocas arden cuando a mis versos cobardes les da por hablarte. Resolver el misterio con un punto y a parte, no sirve de nada que tus manos me aparten pues se que tu mente parte de partes que encajan en huecos que quieren taparse. Esconderse en negarte, mirar para arriba cuando abajo está el arte, no es disfrutar sin miedo a entregarse. Aquí y ahora y poder relajarse, sin ir más allá de lo que tu cuerpo te marque. Parto camas, desgasto engranajes. Mejor cuanto antes para que después todo pase. Parte conmigo miedos antes de que la vida nos canse. 

Qué quieres..

Que quieres que diga si me mata la intriga y mis manos valientes quieren que siga. 

10/3/15

Despierta..

La ventana un poco abierta, la luna que está, como nosotras, despierta, la luz de esta que en tu cara refleja  mil y un colores entre sábanas envuelta. Y tus ojos que juegan con mis nervios que sueñan, antes de cada palabra un suspiro que quema, el alma en vilo entre besos que esperan, cada vez más cerca, cada vez que te acercas construyo campos rodeados de verjas que saltas con solo una sonrisa antes de que me de cuenta. Yo tiro los dados y tu juegas, yo lanzo preguntas al aire que salen de escopetas ciegas, tus respuestas son las balas que entre los dientes aprietas. Se que tu piel es suave antes de que la sienta y de un modo sutil me dejas verla, adivino a tientas, mis manos aciertan a ritmo de caricias sedientas. Esta noche no hay reglas solo nuestra respiración que baila en la misma escena perfecta. Mi mente va más rápido de lo que cuentan mis letras, y un silencio tuyo hace que se abran puertas, que se consuma el tiempo que nunca llega, casi a oscuras intuir tu lengua, mojada de las ganas que tiene de que yo la humedezca, un gesto, una mueca, un pecado oculto camuflado en mezclas de sutileza, tan obvio como me lo merezca. Yo sigo aquí y tu sigues tan cerca. La noche oscura y la luna espera, ansía el consentimiento para terminar de hacerse entera. Latidos que no frenan, te pienso de una manera que en realidad no quisiera pero soplo y echo balones fuera. Un centímetro menos de lo que antes era, se han puesto de acuerdo los labios para un sálvese quien pueda. Y encajan como pequeñas piezas negras, que tiemblen las piernas, que toquen las manos, que vean los ojos abiertos o cerrados, el pacto de impacto impacta en el acto y es aire que exhalo, placer por ambos lados de un momento que entre gemido y gemido repaso y mis dedos abren paso, resbalan hasta hacerse con el control de cada paso que ando, de arriba a abajo, de dentro a fuera, de contigo sin mi en una esfera infinitamente nueva. Llegan mis gritos hasta lejanas tierras y vuelven envueltos en ganas de más antes de que te arrepientas. Manzanas mordidas cuelgan de cuerdas, serpientes entre nuestros cuerpos esperando sus recompensas, miradas que se esconden en habitaciones pequeñas. La luna se da la vuelta, la noche corre de mi cuenta, se que antes que a mi miedo prefieres a mi fuerza. Noto en mi la sangre de tus venas, siento en ti el temblor de tus piernas. Qué hora es?.. Despierta.. Despierta.. Despierta..