Que dice que bla..

- Que dice María que le ha contado Mario que un día Pablo habló con Eduardo y este le dijo que Alfredo, su hermano, había flipado con una historia que había escuchado. Una tal Vanesa, parienta directa de la misma alcaldesa, rompió con su novio porque le fue infiel a esta y resulta que el cornudo, que me han dicho era cojonudo, en el momento de la ruptura del golpe con su puño llegó a romper la mesa, con tal mala suerte que el bol de las fresas salió disparado y le dio a una señora en la cabeza. Entonces, me ha dicho Mariela, que el marido de esa mujer, que era Manolo el de la feria, se levantó de la silla y sacó algo de la cartera, se acercó al chaval, que ya no era novio de Vanesa y le puso una navaja a la altura de las muelas. Y luego, según el hijo de la Consuela, tuvieron que separarles pero no había manera. Hubo sangre, me han contado aunque al final consiguieron sacarles fuera y se fue llorando el novio cornudo y el matrimonio andando por la otra acera. Pero a lo que iba, espera, ¿quién estaba ese día disfrutando allí de una agradable cena? Pues según Marta la loca, estaban Fran y la pescadera, que estuvieron el otro día en la tienda de mi abuela y estos le contaron que se divorcia la Antoñeta, si maja, atenta, a sus casi setenta, que dice la tía que vivir así no le renta, que quiere ver mundo dice, que su marido es una seta y que se va con un mozo del pueblo de la Manuela. Y claro, yo soy muy amiga del nieto de ella que resulta me ha contado que este mozo tiene tela, que es un saca cuartos y que esta vez no es la primera, que todos le conocen y que ya ha arruinado a otras viejas. Tu te crees? Como es la gente que despelleja pero al final todo se sabe que esto es un pueblo y no una gran ciudad de esas.

- Bueno entonces una caña para ti y que es lo que mierdas quiere esta?!

Toc Toc. Soy yo. Se puede?

Soy el impulso que, al fin y al cabo, te mueve. Sabes que te toca joderte si algo te duele y yo voy a ser como el imán que a otro imán, repele. No Esperes a que lo bueno te llegue, sal a la calle y mójate si llueve. No olvides porque el recuerdo es lo que te hace fuerte pero camina siempre mirando al frente. Go go power rangers! El doblaje en español es endeble, estas palabras no son a lo Julio Verne pero voy acorde a un domingo que no quiere verme. Mañana empieza un nuevo año, bienvenidxs al 2017, no tengo propósitos inalcanzables pero si tengo los suficientes. Ya tengo práctica en coser tejidos que suelen descoserse, quien no tiene remiendos que no pueden verse? Frente a mis problemas de primer mundo, la muerte. Hay cosas que no tienen solución y soluciones que están en mis manos como dejar de esconderse, asi que, cabeza alta y más amor a las mentes, que no solo son frías e intransigentes, que también tienen en cuenta los sentimientos que nos pervierten pero saben diferenciar entre lo que es cobarde y lo que es valiente. Conozco a pocas personas y a mucha gente, he curado heridas a base de agua ardiente, al final no todo es tan diferente, es tropezar una y otra vez con la misma piedra que, a nuestra costa, se divierte. Hay quien dice que quiere entender y hay quien de verdad te entiende, yo me he puesto en otro lugar y he sentido que ser tu, joder, duele pero no soy culpable de un todo si no de la mitad que me compete. No soy la salvadora ni la que va a sanar a tu mente, no soy la responsable ni el blanco fácil de tus actitudes tan incoherentes aunque en el fondo se, que no es adrede, que es una parte de ti que se despliega y al igual que a mi, a ti más te hiere pero las horas pasan y no has lanzado ni un aliento que hasta mi llegue. Y días son semanas, semanas son meses, va a llegar un momento en el que ni si quiera me recuerdes, se que tu vida es un ciclo que se repite una y mil veces, que hasta cierto punto no tienes el control de lo que tienes hasta que se desvanece, obviamente que no lo mereces, seguro que quisieran tener más memoria los peces, seguro que al igual que yo, tu también creces, yo sigo mi camino pero puedes cruzarte en el si quieres. Hoy el impulso que me hacía falta ha venido a verme, no para hacer que me olvide de todo pero si para recordarme mis puntos fuertes. Me ha preguntado si puede pasar y yo le he dicho que entre. Ya mañana será otro día y yo espero, despierta, a que llegue.  

La saga serie z..

Al final voy a ser una auténtica Piscis de manual, con el drama que me traigo yo misma conmigo me da para escribir una saga mortal, de las que luego llevan al cine y hacen vomitar. “Yo, yo misma y mis circunstancias” es como voy a llamar al primer ejemplar. Trata de una niña con  moño a la que todo le sale mal porque le da por amar cuando toda la gente le dice que es mejor ir de flor en flor pero ella no lo ha sabido hacer jamás. Esta chica tira los dados y siempre le sale llorar, apuesta por algo y va con todo porque se deja llevar, al final acaba perdiendo y ya se plantea si es que, acaso, no sabe jugar.  Pero no culpa ni señala con el dedo cuando algo le sale mal, su mochila es demasiado pequeña como para llenarla más, solo quiere querer y que la quieran sin más, hacer fácil lo que otros complican parece que por necesidad y bailar, bailar bajo la lluvia que le hace despertar, dejarse mojar, sentir cada caricia que le propicia un sentimiento de estabilidad. Como no quieren hablarle se ha parado a pensar, y ha dialogado con ella misma hasta llegarse a aceptar, ha entendido cada mala palabra y ha descubierto de donde viene la maldad, ahora con más información no juzga la manera de atacar y no llora por su crueldad, llora porque ser ella deber ser difícil de llevar, ahora la entiende aunque no se lo pueda explicar. Fue sincera la coprotagonista de esta obra y la niña del moño no supo cargar con su responsabilidad, echó más leña al fuego cuando debió apaciguar y callar, ella solo quiso defender su verdad y se olvidó de que el ataque no era más que una proyección para tapar la ansiedad. Es complicado pero está haciendo por entender un poco más, busca información y absorbe libros mientras no deja de fumar. La quiere por encima de las circunstancias que le han hecho llorar. Y sigue aquí, no se va. Ha hecho un pacto con el tiempo por si quiere regresar, dejando las escopetas en casa deja la puerta abierta para quien quiera entrar y hablar, aunque sea para darle un final. Y no, esta niña del moño no te va a suplicar, no te va a llorar, no quiere verte la cara para rogar, solo es fiel a si misma y a su forma de pensar y si se ha de acabar que sea con un abrazo que cuando recuerde lo asocie a la felicidad, no quiere guardar un mal recuerdo de lo que fue tan genial. Asumamos nuestro 100% de nuestro 50% de responsabilidad, somos dos por igual, ni tu has sido perfecta ni yo lo he hecho todo mal. La mitad del libro es deseo por volverla a besar, hay episodios de rabia, de dolor y malestar pero los primeros capítulos son un ejemplo de que se puede volver a empezar.

El mundo es una tontería..

Si tu no te das cuenta de lo que vale, el mundo es una tontería, si vas dejando que se escape lo que más querías..

Calla Corazón..

Calla corazón. Por qué gritas en colores fuertes? Ya te he oído, no hace falta que llames mi atención, es solo que no quiero verte. Al final de todo, otra vez tu y yo, pero yo quiero avanzar y tu sigues con lo de siempre. Sabes que la mente me da la razón y tus palabras, al fin y al cabo, son hirientes. Porque no hacerte caso es lo mejor, pues tu solo retienes lo que no quiere quererte y eso día tras día, al final, duele. Hazte a la idea de que un parche es la solución y que ya habrá quien quiera tenerte. Calla corazón, son tus gritos los que no dejan moverme. Porque guardas los recuerdos que intenta borrar mi mente?. Esto es una tortura y tu insistes en el amor, pero el amor ha sido lo que te ha dejado convaleciente. No lo entiendes? Te has hecho pedazos y quieres volver a romperte, has oído, igual que yo, el “no quiero volver a verte” asi que se valiente y deja de hacerte notar porque no tiene sentido que lo intentes. Asúmelo, no nos quiere, ni a mi por débil, ni a ti por fuerte. Calla corazón que son tus latidos mi muerte. 

A cambio de lo que va por dentro..

“No me aportas nada”, boom! bofetón en la cara, a ver quién me levanta de la cama mañana. Mi cuerpo habla porque yo no puedo y ha hecho que me retuerza de dolor en el suelo, “lo físico a cambio de lo que va por dentro” y yo he aceptado deprisa y corriendo pues prefiero sangrar rojo a morir tan lento. Entonces tiemblo y no acierto a ver mi piel que noto se está pudriendo. Son mis manos solo dedos borrosos que sujetan afiladas palabras que en la carne se van hundiendo, no las siento cuando entran dentro pero tiñen ropa de un color sangriento. “No me aportas nada” así que sigo tatuando mi cuerpo, “me has decepcionado” estas palabras cortan también mi aliento. Me siento, me aparto el pelo, se como controlar todo esto pero hoy no quiero, yo que estoy en el mismo punto que estaba hace un mes y medio he de arrancar de raíz sentimientos y no se como hacerlo. Se abre mi boca y escupe negro, por instinto vacío todo lo malo que guardo dentro, son mis ojos solo agujeros, en mi mente frases crueles que apuñalan recuerdos, vuelvo a juntar las letras y dejar que estas me marquen a fuego. Elijo otra manera de gestionar el dolor y no me arrepiento, soy yo frente a un espejo que vuelve a verme de nuevo. Hoy no quiero escribir más ni salir de mi encierro. Hoy no me importaría volar entre las nubes del cielo y reír al hacerlo. Hoy sigo sin entender por que tu boca, que me vuelve loca, ha decidido morderme por dentro, asi que llenaré ceniceros y dejaré actuar a mi cuerpo que es el único que sabe que, poco a poco, me estoy muriendo y parece que tiene las claves para resolver el misterio.

A lxs que no lo entendáis..

Pues por mucho que no lo entendáis, duele.. y desgarra y hace llorar, no se bien por que y a la vez lo tengo claro y quema la piel y se agarra al pecho y te asfixia y la cabeza va tan rápido que como no da a basto hace que te agotes y cuanto más agotada estás menos duermes, menos ganas de hacer cosas tienes, menos ganas de comer y solo te taladra la mente y el alma sin descanso. Por mucho que no lo entendáis yo he vivido esto como cierto, hemos sido verdad, me creo la mía y la suya, no hemos fingido y solo había que vernos.. Y lloro, si lloro y me enfado y me ahoga la rabia y luego siento pena, estoy triste y sigo llorando, no quiero ver a gente, no estoy bien. No puedo seguir viendo sus fotos, me hace mal hacerlo, ella cree que le espío yo solo siento la necesidad de verle la cara aunque sea en fotos viejas y poner cara de tonta cuando lo hago y acordarme del momento en que le saqué esa foto o verla en el 2014 y pensar en lo mona que era o lo que me hubiese gustado conocerla entonces, pero ella eso no lo sabe, supongo es más fácil pensar que la espío.. si, mucho más fácil pensar eso antes de pensar en que solo estoy enamorada como una idiota, la misma idiota que le oye cantar casi a diario o que lee conversaciones de hace tres meses a las dos de la mañana.. la misma idiota que no siempre le ha hablado bien, a la que le ha perdido su chulería o bordería o que no ha tenido en cuenta ciertos aspectos de su vida pero la misma idiota que ha empezado a poner remedio a eso, porque eso se puede solucionar, se puede hablar, me pueden ayudar como espero que lo hagan pero no me has dado la opción ni siquiera de contarte con quien he hablado o a quien he acudido por mi propio bien y por el bien de esto que creía que merecía la pena, o que aún creo que la merezca está claro que eres tu la que sabe de sobra que no merece ni un poco de tu tiempo pues como ya me has dicho "yo no te aporto nada", que puede que sea, por cierto, lo más doloroso que me han dicho nunca. Ayer leí una frase: "que doloroso es dejar ir lo que creías que era real" y en esas estoy, dejándote ir, de la manera que puedo o que voy a tener que poder, cuando me creí que esto era real y me lo creí porque me hiciste creerlo y yo quise hacértelo creer a ti, sin más lo sentimos así y a mi me va a costar olvidarme de eso. Aunque no lo entendáis es difícil, por mucho que ella sentencie con palabras hechos que no son ciertos, o que no me de lugar a hablar como personas adultas que somos, no se puede una desenganchar de un día para otro, el sentimiento de amor que tengo está por encima de todo lo demás y aunque no lo entendáis claro que quiero que esté bien, que se cuide y la cuiden, obviamente porque la quiero, igual que ayer igual que el primer día que me atreví a decírselo, por que por mucho que no lo entendáis no podéis juzgarme, que cara de idiotas hemos puesto todxs alguna vez por alguien. Así que no me digáis lo que tengo que hacer o cuanto debo sufrir o por quien merece o no la pena hacerlo porque ahí no mando ni yo misma y nunca he sentido que llorar sea de débiles, si no me importara os aseguro que no veríais caer ni una lagrima de mis ojos. Se lo he dicho a ella y os lo digo también al resto, he sido verdad, creo que más verdad que nunca porque he querido y porque ha sido fácil con ella, no os atreváis a ponerle tiempo a lo que siento porque ni me arrepentiré ni me arrepiento. A ti, pues te repito que no miento, que puedo pecar de ridícula por lo que intenté en su momento pero de ahí a lo que piensas de mi hay un trecho inmenso en el que no me encuentro y lo siento, no pienso darte la razón nunca en algo que no es cierto.

La hora de las Musas..

Ahora sí que sí. Que sí. Que sí.. He quedado con las musas y han decidido venir, me echan humo en la cara y gritan “Venga, a escribir!”. Tienen prisa pues luego han quedado para salir. Hoja en blanco y ahora me toca a mí. A ver, que quiero decir.. Ah si, que todo lo que tengo de grande lo tengo de cursi con tilde en la “i”. Todas apuntan sus armas cuando me ven venir porque piensan que puedo con todo y que ninguna de sus balas me puede herir. Y en vez de llorar delante de ellas me da por reír pero eso no quiere decir que cuando les de la espalda no me vaya a hundir. No soy de hielo y no me gusta fingir, tengo los talones rotos de tanto correr en dirección contraria a la que tengo que elegir pero sigo aquí y es hora de decidir. Tengo a una musa dormida encima de mi hombro y a otra dictando lo que debo escribir pero acabamos discutiendo porque lo que dice no lo entiendo ya que acaba de llegar de París. “El amor es lo más bonito que te puede ocurrir” “No estás completa hasta que otra persona te complete a ti” Y un etc muy aburrido que le ha contado a Cupido y ahora quiere hacérmelo creer a mí. Esta musa se va a tener que ir. Sigo con lo mío. A mi derecha un cenicero que creo nunca vi vacío y a mi izquierda un cuaderno rojo donde dibujo a seres rotos con dificultades para vivir. A veces rimo, a veces dejo de hacerlo para escribir exactamente lo que quiero decir. A veces estoy viendo una película y tengo que pararla porque mi mente no va a esperar hasta que se acabe el film. A veces estoy tan en la mierda que mi corazón deja de latir. Literalmente oigo como grita, a través de mi boca, pidiéndome salir. Y cuando no me llega el aire y no hay algo que me calme suelo desistir, cada una nos proporcionamos el dolor de la mejor manera que se nos suele ocurrir. Yo sango por los ojos, lloro encima de los folios y, sin querer queriendo, me suelo destruir. Esto no va de quien es más buena o de quien se debe redimir, esto trata de mí como persona individual y de lo que quiero conseguir. Esto va de prohibirme ahogarme y de dejarme sentir. Ahora es por ti pero mañana, o me doy los abrazos que no quieres darme o, voy a empezar a morir. Ojalá no fuese así. He hecho un trato con las musas para aceptar, de una vez, que ya no piensas en mi. Para romper todos los planes que no se van a cumplir, para dejar de mirar fotos con cara de niña feliz. A cambio ellas me van a inspirar y no solo cuando quiera dejar de vivir. Ni bien ni mal, ni mala ni buena, ni libertad ni condena, solo seguir. “Pues tú te lo pierdes” es una frase que jamás me atreveré a decir, pues no es que yo salga ganando cuando tú te alejas de mi, más bien pierdo siempre si pienso en las cosas que estaban por venir. En fin, no será la incertidumbre la que no me deje dormir. Sigo sola que ya lo he hecho otras veces y creo que una más voy a poder resistir. Mientras me sangre el cuerpo no voy a fingir, mientras me quede aliento no voy a dejarme morir, mientras me funcione la mente voy a escupir en las hojas lo que nadie parece que quiere oír. Que no te intereso y has perdido eso que un día hizo que te fijaras en mi? Que te has dado cuenta que estar conmigo no te renta pero no te atreves a decírmelo así? Que tus “te quiero” eran efímeros y que ahora con los míos he de saber apañármelas para poder sobrevivir? Pues ahí poco tengo que decir, excepto que, aunque fuese por respeto, sería la clase de cosas que me gustarían oírtelas decir a ti, si es que eso es así. O por pena, o por lo que un día fui yo, Verena, o por no alargar la escena que me tiene en un sin vivir. Las musas se acaban de ir. Llegan tarde a su fiesta por intentar darme respuestas y evitar que yo misma vuelva a hacerme sufrir. Ya no hay algo que corte cerca de mí, ya no hay miedo dentro de mi cuerpo que me impida dormir. Ya no hay, a qué si? Ahora sí que sí, que sí, que sí..

Soy el gato de Schrödinger..

Y qué más da?, Quien ha hecho las normas de algo que nunca es igual?. De que color es la tinta que narra la historia que aún está por pasar?. Cuándo late mi corazón y en que momento se deja de escuchar?.Y si un quizás, es lo único que me importa para así poder avanzar y no hundirme en el mismo punto, a la misma hora, en el mismo lugar pero en un punto invisible que se pierde con la realidad. Y si quiero comer caramelos y jugar a oscuras con tu pelo olvidando que un día me dio por tartamudear. Y si en sueños sueño que te veo y si con eso me vale y yo quiero pues déjame quererte sin más y ya vamos viendo. Las estrellas se ven porque han muerto y yo, creo, que ya no se brillar. Sube, que te llevo, mi unicornio no es el más bonito pero llega hasta el cielo. Sabemos crear mundos nuevos y perfectos donde los dinosaurios harán de los miedos un juego, donde usaremos agujeros negros en vez de coger el metro, de tu mano no me importará el resto, detesto escribir este texto pero no puedo dejar de hacerlo, me ayuda volver a atrás y leerlo cuando mi vida esté en otro punto y así pueda valorar lo que tengo. En serio, no se bien que hacer con esto y pasan las horas que creo estamos perdiendo. Déjanos abrazarnos y parar un reloj tras otro hasta que explote el tiempo. Somos felices en universos paralelos pero no podemos verlo, soy como el gato en la caja que está, a la vez, vivo y muerto. Y me alejo pero no me detengo, recuerdas? "Sería tonta si quisiera hacerlo".

Loving strangers.. Martes Locos (2x1)

Un día malo lo tiene cualquiera.. y cerró la puerta aflojando las piernas. La cara seca y el alma en pena. Noches mejores, en su cabeza, recuerda. Besos resuenan dentro hasta hacerse oír fuera, quiere cargarle el peso al tiempo pero ha de actuar antes de que muera. Que fácil hacerlo mal y que difícil la espera. Tiene claras las cosas pero no hay quien la crea, entonces abre la cremallera y saca de su memoria todo lo que un día le pareció una buena idea y juega, se ríe, echa de menos y se contagía de la escena. Que suerte tuvo, piensa. Como alguien así pudo fijarse en ella, cuando siempre se vio tan pequeña llegó una gigante tan tierna que puso patas arriba un mundo que nunca había visto tan de cerca. Y a quien se lo cuenta, se alegra. Toda aquella persona que vió en sus ojos la ilusión brindó por esta. Quiseron tirarse a la piscina sin saber si estaba llena pero si estaban juntas ese nunca fue un problema. Ahora, entre otras cosas, siente pena, porque era su momento y no han sabido encontrar la manera. Una ausente, la otra dispuesta. Ya no pide respuestas. Quiere que esté bien por encima de todas las cosas que le molestan. Ha tenido tiempo de hablarse a si misma, sin tapujos, directa y ha entendido ciertas cosas que, en su momento, no tuvo en cuenta. Y le echa de menos y no solo en presencia, amigas tiene muchas pero se sentía tan libre si hablaba con ella.. En poco tiempo le ayudó a salir de un caparazón que solo tenía algunas grietas y quiere seguir contándole historias y escuchar más de las que ella tenga. Pero está siendo un mal martes, vaya por donde vaya se la encuentra. De amores extraños quién tiene la receta.. Al final se deja llevar y confía en que si tiene que ser será o si ha de doler que duela.

Cosade2..

Me he puesto a pensar y creo, que ni tu has estado acertada ni yo he sabido hacerlo. Y así empieza la historia de tiempo al tiempo. De paciencia, buen rollo y chocolate negro.

Juicio Final..

Marioneta de papel, tonta ella, tonta ella otra vez. Quiere y se deja querer. No existe maldad en su piel. Sincera con lo que ansía tener, va de frente gritando que se deja ver. Pone en tu mano un futuro cercano y una realidad que es la única que puede ofrecer. No mienten sus labios, no saben hacerlo sus manos y tu sigues sin creer. De buena tonta y de tonta aborta misiones que aún no puede entender. Cuando quiere querer y recibe en el pecho puñales que rompen el alma además de la piel. Cachos de promesas caen al suelo entre sangre y encima los tiene que barrer. No está bien. Cuando es la boca que tanto ansía la misma que destroza su ser. Palabras son balas cargadas de rabia las que le hacen caer. Frases cortas, sentencias bobas, las que explotan los sueños que caen a sus pies. No entiende pero lo intenta otra vez. Silencio que se deja ver. Una vez más no va a poder ser pues las ganas son todas pero se va a tener que empezar a querer. Y hablando, cree, que se pueden entender pero no arregla algo aquella que habla sola con una pared. Acusada en un juicio inventando en el que no se puede defender y tampoco ha de por que, pues la condenan con pruebas de otro caso que aún está sin resolver. Ella duerme triste pero tranquila porque sabe que su delito ha sido el intentar empezar otra vez aunque no le haya salido bien. Y te pueden culpar o creer pero no ha de justificarse alguien ante incriminatorias palabras que con ella nada tienen que ver. Puedes conceder el beneficio de la duda, no se, sentarte a mi lado o incluso ponerte en mi piel pero no prepares el nudo de la soga solo por lo que otra gente, en el pasado, te hizo creer. Ni yo soy otras personas ni tu eres quien tiene derecho a """tratarme tan bien""". Ni yo soy una santa, cuando se me hincha la garganta y no acierto con palabras para hacerme entender pero joder, no soy un "jó de te", no soy un juicio injusto ni un silencio eterno cuando la solución es tan fácil como escribir un "llá ma me".

Y un etc muy largo..

Las rosas son rojas y el mar es salado, hace calor en verano, la luna sale por las noches y nunca he tenido un gato. No soy un top ten pero tengo mi encanto, sufro de leísmos y, a veces, canto. Mi pelo es sagrado aunque lo destroce tanto, suelo tropezar con la misma piedra aunque casi siempre la salto. Hablo poco y en bajo, no soy tonta, lo se, aunque me intimiden labios. Me paro, pienso y descarto, tengo mil manías y lloro de vez en cuando. Me gustan mis manos. No se hacer retratos pero me entretengo haciendo garabatos, escribo a menudo y a menudo con eso me evado. Disfruto de un baño, suele sonar hip hop en mis cascos, me gusta conducir y perderme en ciudades en las que me suelo ir encontrando. No se usar el rencor porque se me acaba olvidando, no soy mala, por pereza supongo, o porque no es lo que me han enseñado. Siempre empiezo escuchando y es la confianza la que hace que al final termine hablando. No me gusta elegir bando. Prefiero la risa al conflicto buscado. Puedo darme a entender si siento que te está interesando si no, corto rápido. Me aburre la mentira de la misma forma que me cansa un enfado. Sufro como cualquiera aunque lo disimule callando. Me apasiona el tacto, me pone nerviosa el contacto, huelo lo que como y si no me gusta el olor es difícil que lo acabe probando. Soy de impulsos sanos. No me gustan los líos, lo único que tengo de liar es el tabaco. Odio el ataque gratuito y los abrazos falsos. Antes juzgaba antes de establecer contacto, ahora doy las oportunidades que me gustaría que a mi me hubiesen dado. Puedo fingir un orgasmo pero sinceramente, nunca he tenido que usarlo. Me excitan las bocas que se muerden los labios, los hombros descubiertos y los dialectos extraños. Soy más de escribir a mano. Solo tengo un tesoro y se llama “mi hermano”. Mido uno setenta y cuatro y ya no me agacho. Uso gafas desde los cuatro. Tímida, vergonzosa o hay quien rara me ha llamado. No se mentir de un modo descarado, si doy mi palabra la doy a sabiendas de todo lo malo. Me encanta abrir regalos, tocarlo todo con las manos, recordar un olor que me transporta al pasado. Tengo un humor, digamos, complicado. A veces uso la ironía como escudo humano. Me hago pequeña si tu discurso está bien elaborado pero no siempre me achanto. Me gusta hacer fotos sabiendo que en el futuro serán buenos momentos guardados. Hice colecciones de cromos, de pins, de gomas de borrar y hasta de hojas de cambio. Casi nunca he bebido hasta acabar vomitando aunque si me ha pasado. Me gusta bailar cuando salgo. Siempre me concentro cuando empiezo algo pero me suelo ir despistando. No esperes que te cuente que es lo que acabo de hacer pues ya te lo iré contando. Me gusta el presente y el futuro es un “ya vamos viendo” según vaya pasando. He adquirido paciencia al cabo de los años. Se me nota en la cara cuando no me gusta algo. No se ser falsa más de un buen rato. Prefiero hablar poco pero sabiendo que no me lo estoy inventando. No se dármelas de lo que no soy y a las que lo hacen las acabo pillando. Soy más de salado. No se discutir pero si he de hacerlo, lo hago. Las injusticias y las acusaciones creo, siempre ocultan algo. Y todo esto seguido de un ETC muy largo.

Estela..

María abrió la puerta. Al otro lado una sombra, pequeña, quieta. “Quién es? Quédese fuera”. Asustada su voz como el latido que se oía llegar desde su muñeca. Ella una mujer discreta. Elegante de puertas para afuera, en su casa, chándal y una bata cualquiera. La sombra silenciosa parecía estar muerta. Silencio. Atención a los ojos de ella. “Soy yo” y María hizo con la mano un gesto de “entra”. En el salón una mujer sorprendida y una mancha negra. Le ofrece un café y la sombra lo deniega. “Vengo a hablarte de Estela” Susurró la sombra acercándose a ella. “Lo se, espera”. Se levanta María y ya en la cocina abre la nevera. Saca una tarta de ella y coge una cuchara sopera de un cajón de la encimera. Entra en el salón, de nuevo se sienta. “Está bien? Que ha sido de ella?” Pregunta la mujer que hoy se salta la dieta. Come como si esa tarta de aspecto dudoso estuviese buena. Le tiemblan las piernas, las cruza cuando se da cuenta y desvía la mirada hacía la puerta. “Estela quiere verte y me envía a mi para proponerte ir a verla”. La sombra sigue quieta, no tiene rostro, ni brazos, ni parece que quiera. Se pone de pie y María se come de un bocado el último trozo de tarta que queda. Ambos van a hacía la puerta. María, que anda detrás de la sombra, puede ver la calle a través de ella. Es de noche y un niño en la calle grita “ hace un frío que pela!”. Caminan en línea recta, la sombra puede que vaya desnuda y María lleva la bata abierta. Llevan una hora andando cuando ella pregunta “ cuánto queda?”. La luna parecía ser más pequeña, las estrellas que nunca se ven forman ahora extrañas formas geométricas, se oye el silencio y el frío aumenta. “Cuando estés preparada, habremos llegado” Comenta la figura negra y después de decir eso vuelve a quedarse quieta. María observa, sabe que conoce ese lugar pero apenas se acuerda. Ya no hay casas, solo árboles con ramas que se enredan. “Dónde está Estela?” y la sombra se da la vuelta, poco a poco María ve como desaparece esta dejando una señal en la tierra que parece ser una flecha. La sigue y a poca distancia puede ver como alguien le observa. “María!” grita una voz rota al otro lado de una verja. Ambas se acercan. Se reconocen, se abrazan y lloran las mismas lágrimas mientras en las mejillas se besan. “Has tardado más de la cuenta” comenta Estela. “He alargado este momento tanto como me ha dejado que lo hiciera” responde María secando las lágrimas con su bata vieja. Y entran, las dos, en una casa de madera. Al fondo un sofá y una chimenea. “Café?” “Prefiero, si tienes, cerveza” Se hace de día a través de la ventana abierta. Cae el sol entre risas y recuerdos que ambas recuerdan. Se asoma de nuevo la luna cuando María espera una respuesta : “Cuánto me queda?”. “Tengo tantas cervezas como quieras, tenemos miles de historias a medias, en el porche sigue habiendo leña y este momento durará lo que nos duren las fuerzas” dice, con una sonrisa en la cara, Estela. Se cogen las manos y siguen la fiesta.